El anticipo

Si nos facilitaran un anticipo de ese futuro sin crisis que, con tanto cariño, nos están moldeando, aceptaríamos aún mejor el castigo diario que nos infringen.  Si, por ejemplo, los viernes, coincidiendo con el aperitivo, pudiéramos ver lo que nos espera al final del túnel estaríamos mucho más contentos. Unido a la mano de tu chica en cualquier terraza, a tu alrededor aparecería una sociedad murciana que ha alcanzado la media española en paro, pobreza, corrupción, sanidad, justicia, pensiones, cultura o servicios sociales. El ligero sabor amargo de las almendras se mezclaría con el dulce paladar de un buen nivel de empleo tras la magnífica evolución de los sectores agroalimentario, turístico y energético. En la copa de vino se reflejaría una Región con los recursos hídricos plenamente garantizados y un Mar Menor y una costa que ha sabido compatibilizar el desarrollo turístico con el medio ambiente. Con el sol de primavera y el azahar que nos seguiría impregnando, sobre la mesa un periódico sin sección de economía, revolotean las aves y la sombra de los aviones que parten del aeropuerto internacional de Corvera. Eso sí, a las 2, junto cuando pides la cuenta y comienzan a relatarse los recortes de los consejos de ministros y del Gobierno murciano…la luz se desvanece, el vino se avinagra, las almendras se americanizan, los vuelos se hacen rasantes y ya nada es igual ni igualitario. 

NOS QUEDA LA PALABRA / La Opinión 8 de Noviembre de 2013